UN DIA GENIAL

Ayer hizo algo, que como me han dicho, es algo que todo el mundo abria de hacer, fui a ver el gamper al campo. Una experiencia única en la que te sientes como un niño que espera su regalo de cumpleaños, mientras esperas a que abran las puertas del campo, tes iwal el gentio que hay, en el momento en que las abran estas deseando entrar, subes buscando tu entrada, no te percatas de realmente donde estas, hasta que sales por la puerta de hormigon y ante ti se abra un enorme estadio, lleno de sillas, que estavan vacias y un campo verde, perfecto, recien cortado, gracias cariño por esa sensación indescriptible, al igual que un niño que recibe su regalo y al abrirlo descubre que es justo mejor de lo que queria.

A parte de la experiencia quiero denunciar, que en vez de quitar el tapon de las botellas, hay en el campo un objeto que en malas manos es mucho peor que una botella, me refiero al coñazo de las trompetas en manos de un crio, al que por supuesto, sus padres no pueden mantener a ralla y quitarselo cuando es una cosa que molesta a todos. Hasta pronto.